martes, 19 de octubre de 2010

" UN SÍ ROTUNDO A LA VIDA "

Durante los días 21, 22 y 23 de octubre, se celebrará en Sevilla un congreso Internacional sobre el aborto, con la finalidad de compartir información, experiencias y nuevas técnicas para mejorar la calidad de las prácticas abortivas.

Ante este acontecimiento el Arzobispo de Sevilla, Monseñor D. Juan José Asenjo ha escrito una carta bajo el título " UN SÍ ROTUNDO A LA VIDA ". En dicha carta, insta a los grupos y movimientos apostólicos, y otros colectivos diocesanos a intensificar la oración ante el Santísimo Sacramento durante esos días, para impulsar una cultura que acoja y promueva la vida de los no nacidos.

Atendiendo a la petición del Sr. Arzobispo, el Consejo de Apostolado Seglar convoca a los miembros de los movimientos y asociaciones laicales de la Archidiócesis de Sevilla y a cuantos fieles laicos quieran acompañarlos el próximo 21 de octubre para celebrar una Hora Santa de adoración ante el Santísimo Sacramento a las 21.00 horas en Iglesia Colegial del Divino Salvador de Sevilla a favor de la vida.

Yo quisiera desde este humilde blog, animar a todos a unirnos a esta jornada de oración con " UN SÍ ROTUNDO A LA VIDA ". Pero quisiera pedirle también al Consejo de Apostolado Seglar, que convoca esta vigilia de oración el día 21, para que ese día sea un verdadero pedir por la vida. No solo la vida de los no nacidos. Sino, que en esa vigilia de oración se tenga también presente la vida de los nacidos. Por que como dice el Sr. Arzobispo debemos defender " el valor sagrado de toda vida humana desde la fecundación hasta su ocaso natural ". POR ESO TENGAMOS PRESENTE QUE LA DIGNIDAD A LA VIDA, ES LA DE NACER, PERO TAMBIÉN ES LA DE VIVIR DIGNAMENTE.

Rezemos también en esos días, por esos niños que pasan hambre, que son forzados a los trabajos más crueles y explotadores, que son esclavizados, usados y abusados por individuos sin alma y sin conciencia, que lo dejaran marcados para toda su vida. Niños que en paises subdesarrollados están en la calle a los que nadie quiere porque son criaturas que ni saben quiénes son sus padres.

Esta clase de seres humanos desgraciadamente se cuentan por millones.

Y por supuesto, rezemos también por todo el género humano. Por los que no piensan como nosotros, para que encuentren con nuestra formar de vivir en Cristo, la luz de Dios,que es la vida.

Pero también rezemos por nosotros, para que nuestra oración, ilumine nuestra conciencia ante las injusticias que nos rodean y seamos capaces de defender la vida de los no nacidos, y con las misma ganas el dolor, el desamparo, la soledad, el sufrimiento y las incontables humillaciones a las que se ven sometidos todos los nacidos, desde que venimos a este mundo hasta que nos vamos de él.

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